viernes, 11 de febrero de 2011

La memoria humana





La memoria humana es la capacidad de adquirir, almacenar y recuperar la información.
La memoria nos proporciona una base de conocimientos que nos permite comprender la realidad.


Las primeras investigaciones sobre la memoria se deben al psicólogo alemán Hermman Ebbinghaus, que al final del siglo XIX estudió como se retienen las sílabas sin sentido. Defendió que el mecanismo de la memoria requiere una única actividad (repetición), para que los datos que recordamos se asocien entre sí.


Más tarde, Frederic Barlett estudió la memoria utilizando historias, e introdujo en la psicología la teoría de los esquemas y su influencia en los recuerdos.  Los esquemas son conocimientos almacenados en la memoria como consecuencia de las experiencias pasadas. Estos conocimientos almacenados en la memoria están organizados en en forma de representaciones mentales, y constituyen nuestro conocimiento sobre un objeto o un acontecimiento.


En los años 50, George Miller publicó el clásico artículo "El mágico número siete, más o menos dos: algunos límites de nuestra capacidad para procesar información". Con él Miller demostró que las personas pueden retener aproximadamente de cinco a siete elementos a la vez en la memoria a corto plazo. Un elemento es una unidad de información y puede ser una letra simple o un número, y también una palabra o idea. 


En la actualidad, los psicólogos y neurocientíficos que estudian la memoria consideran que ésta es un conjunto articulado de sistemas, procesos y niveles de análisis.


En cuanto a la actual neuropsicología de la memoria se ha comprobado que consta de varios sistemas que nos permiten adquirir, retener y recuperar la información que nos llega del entorno. Cada memoria tiene su propio circuito anatómico, y diferentes lesiones cerebrales borran recuerdos distintos.


Estos diferentes sistemas de memoria operan de manera coordinada y simultánea, así tenemos la impresión subjetiva de que aprender y recordar dependen del funcionamiento de un único mecanismo mental. 


Los procesos básicos de la memoria se basan en el aprendizaje -que consiste en adquirir conocimientos sobre el mundo a través de la experiencia- y la memoria - retención y evocación de esos conocimientos-. 


La memoria para recoger, organizar y recuperar la información sigue tres etapas:
- Codificación: transformación de los estímulos en una representación mental. 
- Almacenamiento: retención de los datos en la memoria para su utilización posterior. 
- Recuperación: Forma en la que las personas acceden a la información almacenada en su memoria. 


Estructura y funcionamiento de la memoria
La memoria podemos estructurarla en tres partes o fases:
- Memoria sensorial: La MS registra sensaciones y estímulos que nos ayudan a desenvolvernos en nuestro entorno.
- Memoria a corto plazo: La MCP guarda la información necesaria para el momento presente; puede convertirse en un recuerdo a largo plazo u olvidarse.
- Memoria a largo plazo: La MLP conserva los conocimientos para su utilización posterior.





Psicología evolutiva

Etapas

1.- Etapa incorporativa (fase oral): Va desde el nacimiento hasta los 2 años de edad. Al nacer el niño/a  pasa de depender en forma absoluta de su medio ambiente. Si la madre y la familia proporcionan un cuidado continuo, consistente y adecuado a las necesidades del niño, se generará en él una sensación de confianza básica, que se traducirá en un sentido de esperanza y optimismo frente a la vida. Por el contrario, si el cuidado temprano es variable, impredecible, caótico o maligno, se generará una sensación de desconfianza.

2.- Etapa niñez temprana (fase muscular anal): Va desde un año hasta los tres años; aquí se fija la noción de autonomía del niño. A medida que el niño sea capaz de controlar esfínteres, usar músculos para moverse, vocalizar, desarrollará una sensación de ser autónomo y aparte de sus padres. Si hay sensación de mucho control, de ser avergonzado ante los primeros fracasos, pueden surgir sentimientos de vergüenza, duda, inseguridad. Los resultantes de un desenlace positivo de esta etapa, es la sensación de tener una voluntad propia.

3.- Etapa locomotora genital (preescolar): Va desde los tres años a los seis años. El niño se percata mas agudamente de su medio externo. Toma la iniciativa para establecer relaciones más cercanas con el progenitor del sexo opuesto. En esta etapa hay mayor preocupación por los genitales, por los padres del sexo opuesto, y en general una mayor noción de las diferencias entre los sexos. La identificación con el padre del mismo sexo es crucial en esta etapa.

4.- Etapa de latencia (escolar): Va desde los seis años a los doce años; el niño muestra su capacidad de desenvolverse industriosamente en la interacción educacional. También se desarrolla la capacidad de interactuar socialmente, por primera vez fuera de la familia. En la medida que la interacción educacional y social se desarrolla efectivamente, se logra un sentido de ser competente; en la medida que esto no se da, aparece un sentido de inferioridad. Muchos problemas de rendimiento escolar, de fobias y aislamiento social tempranos, son característicos de esta etapa. El nombre de latencia dado a esta etapa, se refiere a la suspensión de búsqueda de vínculos heterosexuales, que se evidencia en la segregación pro sexo, frecuentes a esta edad.

5.- Etapa de adolescencia: Se extiende desde los doce años a los veinte años. Como tarea central del desarrollo adolescente está el concepto de consolidación de la identidad. Los cambios físicos y psicológicos de la pubertad, hacen entrar en un periodo de aumento del conflicto psicológico interno, cuya consecuencia será un sentido de continuidad y estabilidad de uno mismo a lo largo del tiempo. Cuando esto no se alcanza, hablamos del síndrome de difusión de la identidad. El fijar los propios gustos, intereses, valores y principios es el modo de crecer. El joven delimita su sí mismo del de sus padres y familia.

6.- Etapa adulto joven: Va desde los veinte años a los cuarenta años, el adulto entra a formar parte de la sociedad al desempeñar un trabajo y relacionarse establemente con una pareja muchas veces formando una familia. El poder compartir una familia en el desarrollo de la capacidad de intimidad, es la tarea central de esta etapa. Esta etapa requiere un sentido de solidaridad y de identidad compartida en pareja. Lo contrario produce aislamiento personal. Lo dicho para la pareja se aplica al trabajar, donde la persona debe mostrar su capacidad de entrega estable a una labor dada.

7.- Etapa adulto medio o maduro: Va desde los cuarenta años a los sesenta años. Lo crucial de esta etapa es la capacidad de cuidar y facilitar el desarrollo de las generaciones más jóvenes. Los adultos de esta edad participan de esta tarea siendo padres, profesores, guías. El adulto que no puede ser generativo, siente una sensación de estancamiento, y vive en forma egocéntrica y sin propulsión hacia el futuro. Los adultos medios necesitan a los niños, y que es tan necesario para ellos cuidar de estos, como los niños necesitan de alguien que los cuide.

8.- Etapa adulto tardío (adulto mayor): Desde los sesenta años en adelante. A medida que el adulto completa el ciclo de haber vivido él, y asegurado que viva la generación siguiente, se llega al tema final del ciclo vital: la integridad reposa en la aceptación de la sucesión de las generaciones y de la finitud de la vida natural. Esta fase final implica el desarrollo de una sabiduría y de una filosofía trascendente de la vida. Por el contrario, si no se adquiere esta noción de integridad, la desesperación y el temor a la muerte se presentarán como resultado de una vida irrealizada.

Las características y tareas de cada una de las etapas constituyen fases en constante movimiento, un individuo siempre está en el proceso de desarrollar su personalidad.


- Enfermedades relacionadas con la pérdida de memoria:

ALZHEIMER

·         Es una enfermedad irreversible y progresiva del cerebro que lentamente destruye la memoria y las aptitudes del pensamiento, y con el tiempo, hasta la capacidad de llevar a cabo las tareas más simples. En la mayoría de las personas afectadas con esta enfermedad, los síntomas aparecen por primera vez después de los 60 años de edad.
·         Es la causa más común de demencia en las personas mayores. La demencia es la pérdida del funcionamiento cognitivo (pensar, recordar y razonar), a tal grado que interfiere con la vida y las actividades diarias de una persona.

No se sabe qué inicia el proceso de la enfermedad de Alzheimer,  pero sabemos que el daño al cerebro empieza de 10 a 20 años antes de que algún problema sea evidente. A medida que aumenta la muerte de las neuronas, las regiones afectadas del cerebro empiezan a encogerse. Cuando se acerca la fase final de la enfermedad, los daños se han extendido y los tejidos del cerebro se han encogido considerablemente.
Señales y síntomas
Los problemas de la memoria son una de las primeras señales del Alzheimer. Algunas personas que tienen problemas de la memoria tienen una condición llamada deterioro cognitivo leve de tipo amnésico. Existen vínculos entre algunos problemas con el sentido del olfato y problemas cognitivos.
 
- Enfermedad de Alzheimer leve: la pérdida de la memoria continúa y surgen cambios en otras capacidades cognitivas. Los problemas pueden incluir perderse, dificultad para manejar el dinero, pequeños cambios en el estado de ánimo y en la personalidad… Las personas frecuentemente son diagnosticadas durante esta etapa.

- Enfermedad de Alzheimer moderada: el daño ocurre en las áreas del cerebro que controlan el lenguaje, el razonamiento, el procesamiento sensorial y el pensamiento consciente. La pérdida de la memoria y la confusión aumentan, y las personas empiezan a tener problemas para reconocer a familiares y amigos. Tal vez no puedan aprender cosas nuevas, llevar a cabo tareas que incluyen múltiples pasos (tales como vestirse) o hacer frente a situaciones nuevas. Es posible que tengan alucinaciones, delirio y paranoia, y quizás se comporten impulsivamente.

- Enfermedad de Alzheimer severa: las personas no pueden comunicarse y dependen completamente de otros para su cuidado. Cerca del final, la persona quizás pase en cama la mayor parte o todo el tiempo a media que el cuerpo va dejando de funcionar.



APOPLEGÍA

La apoplejía o derrame cerebral es un daño cerebral provocado por la interrupción del suministro de sangre al cerebro. Sus causas pueden ser las siguientes:

- Trombosis: Estrechamiento progresivo y bloqueo eventual de una arteria del cerebro o el cuello
- Embolia: Bloqueo de una arteria del cerebro o del cuello por un coágulo o "émbolo”.
- Hemorragia: Ruptura de una arteria del cerebro o de la superficie cerebral.


PARKINSON
·         Es una enfermedad que afecta al sistema nervioso en el área encargada de coordinar la actividad, el tono muscular y los movimientos.
·         Es un proceso crónico que pertenece a un grupo de trastornos que tienen su origen en la degeneración y muerte de las neuronas, las células del sistema nervioso, por lo que recibe el nombre de enfermedades neurodegenerativas.
Los síntomas se manifiestan a partir de que en una zona del cerebro se produce una importante pérdida de neuronas encargadas de controlar y coordinar los movimientos y el tono muscular. La lesión primaria en la enfermedad de Parkinson es la degeneración de unas neuronas situadas en la zona de unión entre el cerebro y la médula espinal, el tronco del encéfalo, particularmente las que se hallan en un núcleo llamado sustancia negra y, de hecho, sólo en una porción de este núcleo que se denomina la parte compacta.
En la Enfermedad de Parkinson se pierden dichas neuronas, por lo cual el núcleo palidece. A medida que las neuronas pigmentadas de la sustancia negra desaparecen, se deja de producir una sustancia llamada dopamina, que es un aminoácido que es capaz de transportar información desde un grupo de neuronas a otro a través de mecanismos químicos y eléctricos. La dopamina se encarga de trasmitir información desde la sustancia negra a otras zonas de cerebro que forman entre sí un circuito de conexiones. Como consecuencia de la degeneración de la sustancia negra disminuyen los niveles de dopamina, apareciendo los trastornos característicos de la enfermedad.
           

JUEGOS PARA MEJORAR LA MEMORIA INFANTIL/ SENIL



 “El Teléfono”
Tipo de juego: De memoria.
 Espacio adecuado: Sentados en el suelo, por ejemplo.
Desarrollo del juego: Una persona hace de madre y comienza diciendo en el oído del compañero de su lado una palabra muy rápido, y éste le dice al de su lado lo que ha entendido y así sucesivamente hasta que se llegue a la persona que hacía de madre y diga lo que en principio había dicho y lo que al final le ha llegado.
Actividad que promueve: Promueve actividades de memoria, verbales y de imitación.
Valores que transmite: Saber escuchar, la importancia de la atención.
Observaciones y adaptaciones: Se pueden decir dos palabras una hacia cada lado, dependiendo de la edad, se dirán palabras de mayor o menor dificultad.


“Parejas”
Tipo de juego: Memoria.
Número de participantes: De 8 a 10 personas
Duración: De 10 a 20 minutos.
Espacio adecuado: Una clase con mesas.
Material necesario: Pares de objetos relacionados.
Desarrollo del juego: Se disponen en una mesa los objetos mezclados. Se coge un objeto y se les dice a los participantes de uno en uno que busque su pareja en la mesa. Tanto los compañeros como el educador pueden dar pistas. Se juega hasta que todos los objetos estén relacionados.
Actividad que promueve: Clasificación y selección, coordinación oculo-manual, desarrollo de la motricidad fina y capacidad mental.
Valores que transmite: Sociabilidad y moralidad entre el niño y los demás. Además de cooperación y colaboración.
Observaciones y adaptaciones: Cuando aprendan a asociar objetos reales se utilizan fotografías para aumentar la dificultad del juego. Según la edad, tras haber hecho las parejas, se esconden todos los objetos y se les pregunta qué objetos han visto.


“Simón Dice”
Tipo de Juego: Memoria.
Edad Adecuada: A partir de los 3 años.
Duración: Depende del número de participantes.
Espacio Adecuado: Se podría realizar o bien en un espacio abierto o en uno cerrado.
Material Necesario: Ninguno.
Desarrollo del Juego: Se colocan todos los partcipantes alrededor de Simón, este comienza a dar órdenes siempre con el mismo enunciado (Simón dice...) y todos tienen que hacer lo que Simón dice, sino quedas eliminado del juego. Si Simón da una orden en la que no pronuncie el enunciado (Ejemplo: correr) no hay que hacer la acción, si la realizas quedas eliminado.
Actividades que promueve en el niño: Favorecen las relaciones espaciales que el paciente tiene con el espacio en el que se desenvuelve, favorece también el razonamiento lógico, la imitación, la memoria, la actividad motriz, las actividades verbales...
Valores que transmite: Favorecen la convivencia y la integración social.
Adaptaciones y observaciones: Otra variante de este juego podría ser cambiando las ordenes. Si Simón da una orden realizas lo contrario de lo que proponga (Ejemplo: “Simón dice poneros de pie” entonces todos se tendrían que sentarse).


“El memorión”
Tipo de juego: de memoria
Número de participantes: tres o más
Edad adecuada: de tres a seis años
Duración: diez minutos aproximadamente
Espacio adecuado: Interior (una clase)
Material necesario: diez objetos y un trapo
Desarrollo del juego: El conductor del juego selecciona diez objetos y los muestra a los jugadores durante treinta segundos. Los últimos diez segundos los cuenta hacía atrás para añadir emoción. Al finalizar el tiempo cubre totalmente los objetos con el trapo. Por turno, cada niño deberá decir uno de los objetos que recuerda, intentando que no se repita ninguno de los ya dichos. Acaba el juego cuando nadie recuerda ningún objeto más o se completa la serie. En el memorión, va aumentando la emoción conforme avanza el juego y quedan menos objetos para nombrar.



"El rápido"
Tipo de juego: de concentración (inteligencia numérica)
Número de participantes: dos
Material necesario: baraja española
Desarrollo del juego: los jugadores se colocan uno enfrente del otro. Se disponen las cartas de la siguiente manera: 
1. dos montones (uno a la derecha y otro a la izquierda) de 5 cartas cada uno.
2. dos cartas de colocan en el espacio que queda en medio de los dos montones
3. se reparte toda la baraja restante entre los jugadores
Cada jugador podrá tener en sus manos hasta 4 cartas, no más. Al destapar las cartas de en medio los jugadores tendrán que ir colocando sus propias cartas en orden numérico, hacia arriba o hacia abajo. Si ninguno de los dos participantes puede colocar una carta, ambos coge una de los montes laterales, y empiezan de nuevo. Así hasta que uno se descarte y gane el juego.










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